Bonus track: Estado de la nación
Dejé pasar infinito tiempo antes de hacer esto. Crei que no llegaría nunca otro texto para redactar, pero por suerte me equivoqué.
Hace unos días, a propósito de esta fecha, mi chiquilla me pregunta: "Eres lo que esperabas a esta edad?". Esa pregunta me obligó a hacer memoria a un capítulo muy anterior de mi vida...
Flashback a cuarto medio: estaba en medio de un estrés tremendo entre la presión de mantener las notas antes de dar la prueba, el preu y el curso de actuación al que yo, irracionalmente y sin causa aparente, había accedido a tomar (en realidad supongo que yo quería, pero ya no recuerdo si fue asi y que rayos me hizo creer que sería buena idea). Me sentía aislado, enfermo en medio de la burbuja de soledad que me había autoimpuesto y medio carcomido por la sensación de que jamás encontraría a alguien que me diera la contención que necesitaba desesperado.
En el curso había una cabra unos años mayor. Nada mal, pero obviamente andaba en otra y yo, que llegaba con uniforme al curso, asi lo entendía. Creo que tenía un hijo y tenía sus propios atados, y asi fue que, en ratos muertos y por inercia, empezamos a conversar y hacer migas. Se hablaba de todo un poco, como suele ser cuando no tienes un nexo real con alguien, y en medio de todo eso ella me contaba trozos de sus dilemas y yo lanzaba los míos. Mis planes para despues, el estudiar en la U, ser bueno en el trabajo y mi busqueda de ser una buena persona. La necesidad de afecto, la desconexion del mundo, la busqueda de esa 'ella' que creía inexistente, etc.
Cuando llegué a ese punto, ella me dijo que no debía desesperarme, que se veía que no era un mal cabro (clásica!), que era un gran avance tener esas ideas claras y me lanzó una frase que siempre se me quedó en la cabeza: "El día que cumplas 30, vas a ser un hombre codiciado" (o algo asi).
Con la ventaja que dan los años, mi polola me dice ahora que eso en idioma de mina significa "si no fueras tan chico te comería con papas". De haber sabido...
Independiente de la veracidad de eso, la frase se convirtió en una suerte de espada de Damocles para mi: ¿sería capaz de cumplir esa predicción o sería aborbido por mis miedos e inseguridades? No sabía si tendria el tiempo y las capacidaddes de convertirla en realidad.
Así fue como la frase quedó como recuerdo anecdótico y yo empecé a recorrer el camino de los estudios y lo que ello conllevó. Cada vez que los problemas se me venían encima, pensaba en ello y en que todo parecía indicar que el dia que cumpliera 30 simplemente iba a ser un tipo lamentable, alguien que como muchos se iba a quedar a medio camino de lo que pudo ser. Esa idea me dolía profundamente y, a ratos, me permitía salir a flote en base a la rabia, pero no bastaba. Como saben, fue un período complejo, en el que me perdí de mi centro, en que deje de ser quien era y me vi obligado a ser el que otros querían para poder sobrevivir. Gente muy importante estuvo ahí y me convenció de seguir, pero por desgracia estaba en una fase de absorción de energía, y hasta el dia de hoy me siento culpable de no haber devuelto a ellos lo mucho que dieron por mi en ese entonces.
Al final salí. Con muchas dificultades, pero salí. Empezaba a verme libre, pero entonces, ya había perdido mucho tiempo. Me había quedado atrás y la gente que había partido a mi lado ahora estaba a mucha distancia, incapaces de ayudar a alguien que no ofrecía garantías de seguridad aún. La cuenta atrás ya estba encima y yo iba a llegar a la adultez 'legal' dependiente y vulnerable como un cabro chico.
Y el milagro pasó: cuando menos lo esperé apareció una nueva posibilidad de creer en los sueños. Recibí una fuerza y unas energías que creía perdidas allá atras en los tiempos que el futuro estaba lejos, y en cosa de segundos fui quemando naves que adeudaba a mi vida desde hacía años. Sin darme tiempo a pensar en ello avancé pese a mi mismo y me vi convertido de un dia para otro en algo diferente, como el fuego que demora en prender y, de repente, explota en una llama intensa y empieza a dar calor. Por fin superé mis limites y despues de años de oscuridad volví a ser parte del flujo de energía y no mas un parásito. Finalmente, un día me miré al espejo y la persona que estaba ahi era otra: una mirada nuevamente limpia, una confianza que no conocía y recuperada la fe en mi capacidad para torcer el mundo a mi forma si lo deseaba.
En los últimos 3 años la vida me ha devuelto la posibilidad de tener el crecimiento que congelé en medio de la pena, y yo devuelvo eso con la energía que puedo dar. Mucha gente quedó (o quiso quedar) en el camino, y espero que algun dia pueda agradecer de forma correcta su preocupación por mi en mis malos días. Hoy puedo decir que tengo mi cartón, una pega decente, la posibilidad de tener las cosas que quiero y, lo mas importante, a mi familia y en especial, a una persona maravillosa que no solo ha sido mi impulso todo este tiempo, sino la fuente de nuevos sueños: el de seguir adelante, el de negocios propios, el de una casa y, junto a ella, un hogar. Ha sido el último paso en la construcción de quien soy ahora, y, por que no, puedo soñar con que sea el definitivo.
El día es hoy. La frase se vuelve realidad. Me hago la pregunta en silencio y pienso.
Aun no soy del todo la persona que quiero ser. Supongo que algunas cosas son trabajo de toda una vida. Pero si puedo decir con bastante orgullo que hoy cumplo 30 años y, por primera vez desde que empezaron mis problemas, siento que tengo en mis manos la posibilidad de lograrlo. Me siento cada vez mas cerca de la meta y, lo que es mas importante, me siento feliz de ser quien soy.
Hasta la próxima, y ojalá ustedes puedan también responder sus propias preguntas.
Hace unos días, a propósito de esta fecha, mi chiquilla me pregunta: "Eres lo que esperabas a esta edad?". Esa pregunta me obligó a hacer memoria a un capítulo muy anterior de mi vida...
Flashback a cuarto medio: estaba en medio de un estrés tremendo entre la presión de mantener las notas antes de dar la prueba, el preu y el curso de actuación al que yo, irracionalmente y sin causa aparente, había accedido a tomar (en realidad supongo que yo quería, pero ya no recuerdo si fue asi y que rayos me hizo creer que sería buena idea). Me sentía aislado, enfermo en medio de la burbuja de soledad que me había autoimpuesto y medio carcomido por la sensación de que jamás encontraría a alguien que me diera la contención que necesitaba desesperado.
En el curso había una cabra unos años mayor. Nada mal, pero obviamente andaba en otra y yo, que llegaba con uniforme al curso, asi lo entendía. Creo que tenía un hijo y tenía sus propios atados, y asi fue que, en ratos muertos y por inercia, empezamos a conversar y hacer migas. Se hablaba de todo un poco, como suele ser cuando no tienes un nexo real con alguien, y en medio de todo eso ella me contaba trozos de sus dilemas y yo lanzaba los míos. Mis planes para despues, el estudiar en la U, ser bueno en el trabajo y mi busqueda de ser una buena persona. La necesidad de afecto, la desconexion del mundo, la busqueda de esa 'ella' que creía inexistente, etc.
Cuando llegué a ese punto, ella me dijo que no debía desesperarme, que se veía que no era un mal cabro (clásica!), que era un gran avance tener esas ideas claras y me lanzó una frase que siempre se me quedó en la cabeza: "El día que cumplas 30, vas a ser un hombre codiciado" (o algo asi).
Con la ventaja que dan los años, mi polola me dice ahora que eso en idioma de mina significa "si no fueras tan chico te comería con papas". De haber sabido...
Independiente de la veracidad de eso, la frase se convirtió en una suerte de espada de Damocles para mi: ¿sería capaz de cumplir esa predicción o sería aborbido por mis miedos e inseguridades? No sabía si tendria el tiempo y las capacidaddes de convertirla en realidad.
Así fue como la frase quedó como recuerdo anecdótico y yo empecé a recorrer el camino de los estudios y lo que ello conllevó. Cada vez que los problemas se me venían encima, pensaba en ello y en que todo parecía indicar que el dia que cumpliera 30 simplemente iba a ser un tipo lamentable, alguien que como muchos se iba a quedar a medio camino de lo que pudo ser. Esa idea me dolía profundamente y, a ratos, me permitía salir a flote en base a la rabia, pero no bastaba. Como saben, fue un período complejo, en el que me perdí de mi centro, en que deje de ser quien era y me vi obligado a ser el que otros querían para poder sobrevivir. Gente muy importante estuvo ahí y me convenció de seguir, pero por desgracia estaba en una fase de absorción de energía, y hasta el dia de hoy me siento culpable de no haber devuelto a ellos lo mucho que dieron por mi en ese entonces.
Al final salí. Con muchas dificultades, pero salí. Empezaba a verme libre, pero entonces, ya había perdido mucho tiempo. Me había quedado atrás y la gente que había partido a mi lado ahora estaba a mucha distancia, incapaces de ayudar a alguien que no ofrecía garantías de seguridad aún. La cuenta atrás ya estba encima y yo iba a llegar a la adultez 'legal' dependiente y vulnerable como un cabro chico.
Y el milagro pasó: cuando menos lo esperé apareció una nueva posibilidad de creer en los sueños. Recibí una fuerza y unas energías que creía perdidas allá atras en los tiempos que el futuro estaba lejos, y en cosa de segundos fui quemando naves que adeudaba a mi vida desde hacía años. Sin darme tiempo a pensar en ello avancé pese a mi mismo y me vi convertido de un dia para otro en algo diferente, como el fuego que demora en prender y, de repente, explota en una llama intensa y empieza a dar calor. Por fin superé mis limites y despues de años de oscuridad volví a ser parte del flujo de energía y no mas un parásito. Finalmente, un día me miré al espejo y la persona que estaba ahi era otra: una mirada nuevamente limpia, una confianza que no conocía y recuperada la fe en mi capacidad para torcer el mundo a mi forma si lo deseaba.
En los últimos 3 años la vida me ha devuelto la posibilidad de tener el crecimiento que congelé en medio de la pena, y yo devuelvo eso con la energía que puedo dar. Mucha gente quedó (o quiso quedar) en el camino, y espero que algun dia pueda agradecer de forma correcta su preocupación por mi en mis malos días. Hoy puedo decir que tengo mi cartón, una pega decente, la posibilidad de tener las cosas que quiero y, lo mas importante, a mi familia y en especial, a una persona maravillosa que no solo ha sido mi impulso todo este tiempo, sino la fuente de nuevos sueños: el de seguir adelante, el de negocios propios, el de una casa y, junto a ella, un hogar. Ha sido el último paso en la construcción de quien soy ahora, y, por que no, puedo soñar con que sea el definitivo.
El día es hoy. La frase se vuelve realidad. Me hago la pregunta en silencio y pienso.
Aun no soy del todo la persona que quiero ser. Supongo que algunas cosas son trabajo de toda una vida. Pero si puedo decir con bastante orgullo que hoy cumplo 30 años y, por primera vez desde que empezaron mis problemas, siento que tengo en mis manos la posibilidad de lograrlo. Me siento cada vez mas cerca de la meta y, lo que es mas importante, me siento feliz de ser quien soy.
Hasta la próxima, y ojalá ustedes puedan también responder sus propias preguntas.